1 de noviembre de 2023 – Un juez federal de San Diego descubrió que realizaron más de 300 transferencias de dinero ilícito desde cuentas en Estados Unidos. La sede de los mexicanos estaba en Monterrey.
El argentino Juan Carlos Palermo canalizó durante años capitales de países llamados de alto riesgo de lavado de dinero a casinos de Las Vegas sin que las autoridades fiscales estadounidenses lo notaran.
De acuerdo con documentos de tribunales federales en San Diego, donde Palermo se declaró culpable, el hombre de 64 años logró mover por lo menos $17,7 millones de dólares de fuentes en México, Argentina, Islas Caimán, Suiza, Emiratos Árabes Unidos y Hong Kong a casinos en Las Vegas.
Palermo trabajaba como agente promotor para un casino del estado de Nevada y recibía comisiones por conseguir llevar a Las Vegas a apostadores de alto nivel. Pero a la par de ese empleo, llevó a cabo su propio negocio similar, sin cumplir con informar a las autoridades estadounidenses sobre el manejo de capitales.
Al declararse culpable de un cargo federal, Palermo reconoció en mayo del año pasado ante el magistrado Dana Sabraw que abrió diversas cuentas bancarias en Estados Unidos para recibir el dinero que transfirió desde los siete países mencionados. Luego, desde esas cuentas bancarias que administraba, pasaba el dinero a la industria de casinos en Las Vegas.
Palermo llevó a cabo su negocio de octubre del 2012 a abril del 2020, cuando fue detenido. Dos años después se declaró culpable de un cargo federal por conspiración para operar un negocio sin licencia de transmisión de dinero.
«El argentino de 64 años logró mover por lo menos $17.7 millones de dólares de fuentes en México, Argentina, Islas Caimán, Suiza, Emiratos Árabes Unidos y Hong Kong a casinos en Las Vegas.»
De acuerdo con una averiguación de la oficina de Investigaciones Criminales del Servicio Interno de Ingresos (IRS), al operar sin licencia, Palermo dejó de cumplir con reglas establecidas para ese tipo de negocio. Sin embargo, lo más importante es que evadió cumplir con normas federales para prevenir el lavado de dinero, parte del cual procedía de países considerados de riesgo.
El negocio de Palermo realizó por lo menos 200 transferencias de parte de unos 50 patrocinadores por más de 17 millones, pero al pasar el dinero a cuentas secundarias dificultó esclarecer de dónde originalmente surgieron esos capitales.
Al aceptar su culpabilidad, Palermo mitigó su posible condena y ahora enfrenta una sentencia potencial de cinco años de prisión y una multa de un cuarto de millón de dólares. El juez Sabraw no ha fijado una fecha para su sentencia.
La fiscalía federal en San Diego anunció esta semana un nuevo dato, de enorme magnitud. Dos mexicanos relacionados con el caso de Palermo también se declararon culpables de operar sin licencia una empresa de transferencias de fondos a casinos en Las Vegas. Las autoridades han omitido informar si este caso se descubrió por colaboración del argentino Palermo.
Los mexicanos Francisco Alberto Garza Vargas y Ricardo Nájera Almaguer operaron de la misma manera que Palermo, pero con una empresa establecida, Carma de Monterrey Sociedad Anónima de Capital Variable.
Como Palermo, Garza Vargas había sido un agente registrado ante la Comisión de Jugos del estado de Nevada y trabajó como comisionista que promovía que llegaran a Las Vegas apostadores importantes.
De acuerdo con documentos judiciales, los dos mexicanos realizaron por lo menos 115 transferencias ilegales de dinero desde Monterrey a cuentas bancarias de casinos de Las Vegas, por un total de $8,12 millones de dólares.
Carma de Monterrey sirvió como conducto para que desconocidos que deseaban apostar desde el extranjero en casinos en Nevada transfirieran su dinero a Garza y Nájera, quienes a su vez recibían el dinero en cuentas bancarias vinculadas a su negocio a cuentas bajo control de los casinos. Al operar de esa manera, los acusados evadieron informar sobre el origen de los capitales y también obstaculizaron el escrutinio de las autoridades fiscales estadounidenses.
«Los mexicanos Francisco Alberto Garza Vargas y Ricardo Nájera Almaguer operaron de la misma manera que el argentino Palermo, pero con una empresa establecida, Carma de Monterrey Sociedad Anónima de Capital Variable.»
El magistrado Sabraw aceptó la declaración de culpabilidad de los dos acusados y de su empresa, pero ordenó que cubran multas penales y otras sanciones por un total de $3.19 millones de dólares. Esa sanción financiera es previa a la sentencia para la que el magistrado tampoco ha establecido una fecha.
Cuando una persona extranjera llega como turista o visitante temporal a Las Vegas, apuesta en algún casino y gana, tiene que pagar al IRS un impuesto de aproximadamente el 30 por ciento del premio que ganó.
Mediante la manera en que operaron los tres acusados se supondría que el dinero habría partido desde cuentas bancarias legítimas dentro de Estados Unidos, sin que se informara que en realidad era capital de apuestas procedente del extranjero y sin precisar quién envió originalmente el dinero.